Hoy os presento el fondant de nubes, que cómo ya os dije anteriormente, es una de las recetas necesarias para preparar una tarta fondant. Poco a poco iré publicando todo lo necesario para realizarla.
Los ingredientes son muy sencillos y se pueden conseguir fácilmente en cualquier supermercado: azúcar en polvo y nubes de golosina ( las nubes son esas chuches blanditas y esponjosas que suelen ser de color blanco y rosa, los americanos las llaman marshmallows).
Uno de los problemas a la hora de hacer el fondant es que necesitamos la parte rosa de la nube por un lado y la blanca por otro, para así tenerlas separadas y poder tintarlas o utilizarlas tal cual.
Lo ideal es encontrar bolsas con nubes de los dos colores ( algunas veces las suelo comprar en el lidl o en el aldi, aunque no están durante todo el año ), pero lo normal es encontrarlas o bien cilíndricas (con un núcleo blanco y una capa exterior rosa), o bien la mitad de cada color ( en el mercadona las tenemos así en bolsas de 200 grs., por eso tendremos que cortarlas por la midad con unas tijeras ).
Con la parte rosa podremos hacer todos aquellos colores que lleven el rojo en su composición ( rosa, rojo, naranja, marrón, violeta, negro, etc.) y con la parte blanca haremos el resto de colores o el color blanco propiamente dicho.
Ahora vamos con el azúcar glass por que no se puede utilizar el que se muele en casa con la thermomix o con un molinillo tradicional, porque el fondant resulta arenoso. Tenemos que utilizar azúcar glass comercial (yo suelo comprar unos envases cilíndricos de Azucarera Española o también unos que comercializan en el mercadona).
Una vez que ya sabemos los ingredientes necesarios, os pondré la cantidad que necesitamos de cada uno de ellos.
Ingredientes:
- Nubes ( separada la parte blanca de la rosa )
- Azúcar glass ( doble de peso de azúcar que de nubes )
- Un poco de agua para humedecer las nubes
- Si lo veis necesario, un poquito de mantequilla para envadurnarse las manos
Preparación:
Coger un bol de cristal que sea apto para microondas, tarar y pesar las partes blancas de las nubes y anotar su peso. Reservar.
Hacer lo mismo con las partes de color rosa. Reservar. Podéis trocear un poco más cada nube en trocitos más pequeños para que se fundan mejor y no se quemen.
Utilizar otro recipiente para pesar el azúcar y reservar. Ya sabéis que siempre pondremos doble cantidad de azúcar que de nubes. ( sí las partes blancas pesan 100 grs., tendremos que utilizar 200 grs. de azúcar y sí las rosas pesan otros 100 grs., utilizaremos otros 200 grs. de azúcar para éstas ).
Salpicar con un poco de agua las nubes ( simplemente metemos la mano debajo del grifo y sacudimos, aproximadamente una cucharada de agua para 200 grs. de nubes será suficiente). Luego removemos un poco las nubes con las manos para que se humedezcan. .
A continuación metemos el cuenco en el microondas para que se fundan.
Cada microondas es un mundo, como pasa con los hornos, así que tendréis que ir probando poco a poco hasta saber el tiempo y la potencia que necesitan para fundirse. Lo ideal es meter las nubes, a potencia media, dejarlas unos segundos y sacarlas, remover un poco con una cuchara y volver a meterlas, quizás un minuto o dos. Así hasta que estén desechas ( cuanta mayor sea la cantidad, más tardarán ).
Tened en cuenta que el azúcar guarda mucho el calor y, aunque cuando saquemos las nubes del microondas queden aún trocitos sin fundir, darles unas vueltas y aplastar los trocitos con el dorso de la cuchara, sin necesitad de volver a meterlas otra vez porque correríamos el riesgo de que se quemasen o de quemarnos nosotr@s.
Sobre la mesa poner el azúcar glass que teníamos pesado, en forma de volcán y echar las nubes fundidas en medio ( primero lo haremos con las rosas y luego con las blancas o viceversa ). Empezar a amasar, primero con una cuchara de madera y luego podremos pasar a las manos untándolas con un poco de mantequilla para que no se nos pegue la masa.
Tiene que quedar una masa fina, elástica y uniforme, como sí fuese plastilina.
Una vez tengamos la masa hecha, este será el momento de teñirla sí queremos hacer fondant de distintos colores.
Separamos porciones de masa y a cada una le ponemos el color que queramos. Es mejor utilizar colorantes en pasta ( que no “aguarán” la masa ), que los líquidos. Sí no queremos teñir el fondant, tendremos únicamente dos colores para hacer la tarta, el blanco y el rosa ( como fue el caso de mi primera tarta fondant ) y será cuestión de combinarlos para que la tarta quede bonita.
Ya está el fondant terminado y se puede utilizar ya mismo o sí por el contrario lo vamos a utilizar en otro momento se debe guardar bien envuelto en plástico de cocina en la nevera y dejar que se ponga a temperatura ambiente antes de usarlo ( podéis incluso meterlo unos segundos en el microondas para que sea maleable ).
Saber que una vez que cubramos la tarta con el fondant ya no se debe de meter ésta en la nevera por que con la humedad de la tarta y la condensación el fondant se estropea.
El resto de fondant que no hallamos utilizado se puede conservar de nuevo en el frigo como anteriormente he dicho.
Haremos las distintas figuras que queramos para decorar nuestra tarta estirando la masa con un rodillo y recortando con los moldes que tengamos. Estiraremos un trozo lo suficientemente grande para cubrir primero la tarta por encima.